Guillermo fortificó Normandía (rompiendo así la vieja amistad normanda con los Capetos) y la Isla Británica empezando así siglos de temor para cada consecuente rey Capeto.

Ya crecido mantuvo una inteligente política de echar vasallos contra vasallos manteniéndolos ocupados mientras picaba de a poco región tras región agrandando así el reino.

Guillermo el "ex Bastardo" tenia un hijo, Roberto Curthose ("Pantalones Cortos") quien no podía esperar a la muerte del padre e inmediatamente le reclamó Normandía y Maine. El rey francés estimuló desde ahí la inquina entre padre e hijo y así dejó en paz a su propio reino.

Realmente fue un reinado decisivo para Francia ya que no temió bautizar a su recién nacido hijo mayor y próximo heredero con un nombre típicamente carolingio como lo es Luis. De esa forma los viejos fantasmas de Carlomagno y descendencia ya fueron enterrados en los ánimos de la familia real.

Con las nuevas adiciones territoriales, el poder flordeliseado se hizo sentir cada vez más...

Felipe aunque mantuvo la clásica alianza entre el Reino y el clero, fue bastante despótico con los monjes y los desafió con un rapto de una mujer noble casada aunque él mismo ya estaba casado desde hace 20 años.

A la muerte de ese rey la dinastía ya había cumplido un siglo, eso ya es algo entre las murmuraciones de nobles deseosos de sublevaciones y un latente enemigo poderoso allende el Canal de la Mancha.